NEVANDO MANSAMENTE

Hay nieves salvajes, de ventisca, amenazadoras, pero la de hoy era de bosque encantado.

La ruta ha transcurrido desde el parking de Majavilán, subida a Marichiva, Puerto de la Fuenfría y bajada por el camino viejo de Segovia.

En el puerto de la Fuenfría es curioso, pero siempre se dejan la puerta abierta y hay una corriente de narices, nos tuvimos que poner las gafas de ventisca, pero sólo fueron unos minutos.

Recomiendo la bajada por el camino viejo de Segovia, a la derecha de la calzada romana mirando hacia abajo, ya que es mucho más bonita, es un sendero estrecho que discurre entre pinos cruzando arroyos, en vez de la autopista pedregosa de la calzada.

A pesar de que ya oigo de nuevo las risas de mi compañero David acerca de si habíamos fumado y tal, al final y llegando ya al coche divisamos dos corzos y casi a continuación un arrendajo, ¡ánimo David con tu recuperación!.  No sé ni cómo los vi, porque estrenaba GPS Garmin Oregon 600 y fui mirando la pantalla más tiempo que el paisaje, cosas de un gadgetómano.

Son las cosas que te aporta salir cuando los demás se quedan en casa, cuando anuncian un domingo frío y con nieve, qué agradable verlo con la chimenea encendida... Pero la mayoría de la gente no tiene chimenea y sólo oye llover. La sensación de libertad y paz, de contacto con la naturaleza, cuando nieva mansamente y te encuentras con poca gente es única. Y la poca que te encuentras muestra su felicidad en el saludo o la fácil conversación que se establece en el cruce.

Ahora me tocan 5 fines de semana con curro, así que ya veremos cuándo hay próximas salidas.

Y ahora un toque de atención. Decir que aunque ahora esté de capa caída, me encanta el running y el trail running, o sea correr por el campo y montaña, ver mis entradas anteriores. Pero nos encontramos en Marichiva con un grupo de corredores en mallas piratas, zapatillas y nieve por los tobillos. Genial (o no tanto), pero sólo uno llevaba mochila. Un resbalón en esa nieve traicionera blanda arriba dura abajo, un esguince fuerte y ... con esa temperatura estás vendido. Dos amigos no te bajan y si estás sudando en dos minutos tu cuerpo se vuelve de hielo. ¿dónde está un extra de ropa, una venda, una manta térmica...? No pesa nada, casi todos los trail runners llevan algún extra, en muchas carreras es obligatorio. No nos olvidemos de que la sierra de Madrid a 2000 metros en invierno todos los años causa bajas, esa misma mañana en Peñalara una más de un chaval de 25 años por hipotermia, y encima iba preparado. No me extiendo más, que siga nevando y lo disfrutemos.

Ruta hecha el 9-2-2014.
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